Tener la pieza de recambio que necesitas durante una reparación no sirve de nada.
Concretamente, no sirve de nada si no la encuentras.
En los talleres de reparación se almacenan muchas piezas de repuesto.
Debes tener claro en todo momento lo que tienes, y sobre todo, dónde lo tienes.
Si no, no puedes resolver la avería.
Dime si te ha pasado alguna vez esto:
- Pides un componente, y más tarde te das cuenta de que ya lo tenías.
- Revisas en todas partes, y la pieza que buscas está en la última que has mirado.
- No estás seguro de si el material que pediste ha llegado.
- Una persona pide un recambio, otra lo recibe, y otra lo almacena, sin que ninguna sepa lo que ha hecho la otra.
- No estás seguro de si tienes varias unidades del mismo recambio en distintos lugares.
- No sabes cuánto dinero hay almacenado en forma de recambios.
Todo esto es muy fácil de solucionar.
Es facilísimo saber lo que hay, dónde está, si está pedido, quién lo ha pedido…
Solo hay que tener la herramienta adecuada, y saber usarla correctamente.
Cuéntame.
¿Te has sentido aludido en alguno de los puntos anteriores?
PD: Si tienes curiosidad por saber cuál es mi herramienta favorita para organizar el almacén de recambios, mira zafirplan.com
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