Imagen extraída de Cibernoticias Express
Muchas veces nos encontramos que, ante una avería, ni siquiera consultamos cuánto puede costarnos la reparación. Simplemente tenemos la excusa perfecta para comprarnos algo nuevo, con mejores prestaciones, o simplemente más “de moda”.
Un ejemplo es la telefonía móvil. Nos falla la batería y llamamos a nuestro operador para que nos ofrezca el último modelo que hemos visto en la tele, o a un vecino. Cambiar una batería puede costarnos entre cinco y veinte euros, mientras que cambiar el terminal es mucho más caro. Incluso si te lo regalan, te mantienen como rehén durante un montón de meses. Además las compañías que no te ofrecen terminales tienen tarifas más económicas, así que está claro que el terminal lo pagas igualmente. Seguramente usarás tu nuevo y flamante teléfono para hacer exactamente lo mismo que hacía el anterior.
Seguro que esto que te cuento no te suena nada extraño, pero vamos a analizarlo desde un punto de vista más ético.
Habrás oído hablar del tantalio, o el coltán. Se trata de un mineral cuyas principales reservas se encuentran en la República Democrática del Congo. Su extracción es simple: dan un martillo a un niño y le obligan a cavar un agujero, sacando los trozos de coltán. El niño recibe a cambio comida (poca o ninguna) y no tienen ninguna garantía de seguridad. Si la cueva que está cavando se derrumba, buscan a otro niño que cave en otro sitio. Ni siquiera se preocupan en recuperar su cadáver. Suena muy macabro ¿verdad? Pues esto ocurre, y ahora viene lo peor. Este mineral es muy caro. Del coltán se extrae el tantalio, con el que se fabrican componentes electrónicos. Su principal uso está en los condensadores en miniatura, que son básicos para poder fabricar circuitos electrónicos de un tamaño reducido. Los encontramos en ordenadores, teléfonos móviles, televisores planos, MP3, etc. Es decir, que todos llevamos encima minerales extraídos por niños a golpes de piedra.
Después de este ejemplo, quizás pienses que no es tan divertido tirar un teléfono que aún está en garantía para tener una versión más nueva y con mejor diseño. Es cierto que casi todo lo que consumimos puede tener manchas de sangre. Compramos casas en las que han podido ocurrir accidentes durante la construcción, comemos carne, etc. La solución puede ser no consumir estos productos, pero eso es casi imposible. Si supiésemos de donde salen los componentes de nuestros teléfonos, tomaríamos consciencia de la globalización. Por ejemplo, el óxido de titanio utilizado para hacer pigmentos blancos para pintura proviene de los pantanos de Florida, así que tu teléfono tiene componentes de casi cualquier parte del mundo, con miles de historias humanas detrás.
Me gusta pensar que vivimos en un ecosistema, como un acuario de peces. Todos colaboramos en el mantenimiento, si no, el ecosistema se destruye. Así que mi solución es que, cuando algo se puede reparar, se repara, salvo que el coste sea demasiado elevado. Por ejemplo, he reparado unos cuantos receptores TDT de vecinos y amigos. A veces cobro cinco o seis euros, a veces nada, así que no es rentable para mi, porque tardo una o dos horas, a parte de los materiales. Lo hago porque pienso en que si ese aparato acaba en la basura, otro niño deberá extraer coltán a pedradas, varios litros de petróleo deberán ser convertidos en plástico, etc. Quizás el dueño del aparato puede permitirse comprar otro nuevo, pero el chaval que está cavando merece nuestra consideración.
También reparo circuitos electrónicos que los servicios técnicos oficiales simplemente sustituyen. En algunos casos sí que resulta rentable, porque una placa electrónica puede valer entre 300 y 1000€. Aquí se puede cobrar el precio real de las horas empleadas, y todos salimos ganando (excepto el servicio técnico). En algún caso puedes tener la tentación de sustituir el equipo, pensando que por un poco más tendrás un equipo moderno y con mejores funciones. En el caso de que la balanza entre los pros y los contras esté equilibrada, piensa en los niños africanos antes de decidirte.
¿Estás de acuerdo? Espero tu opinión, así que comenta.
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Luis Martinez dice
En cierto país latinoamericano que vivo, reparar puede salir más barato que comprar algo nuevo
Andrés dice
Aunque concuerdo con vuestros comentarios, pero no en todo.
El mundo se mueve por dinero. Este es el problema principal. Frecuentemente me encuentro en situaciones donde reparación supone coste de más de 50% del aparato nuevo. Para mi mismo suelo reparar muchas veces, pero una persona que tiene que llevar al servicio técnico un aparato y pagar las horas y componentes, no resulta muy rentable. Yo mismo hace un mes tuve que tirar una lavadora en “perfectas condiciones”, tenía 15 años y a la placa electrónica le ha caido agua y se ha chamuscado por completo. Placa nueva (sin mano de obra) costaba 215€, lavadora nueva 230€ (de oferta). La decisión fue evidente.
Así que todo es cuestión del dinero. Está bien que ayudemos a los amigos y les reparemos las cosas gratis o por una cerveza. Pero eso no solucionará el problema de desechar las cosas. Al final te cansas de hacer los favores y no todo el mundo tiene acceso a un técnico amigo.
Realmente, creo, la solución es el reciclaje. Pero la forma de hacerlo está en manos de los políticos … y estos miran que beneficio habrá de esto. Para ellos, ninguno.
Así que los niños (desgraciadamente) seguirán cavando en las minas, los fabricantes buscarán el mayor beneficio posible sin importar todo lo demás y los políticos se preocuparán de mantenerse en poder.
ROBERTO dice
REPARAR siempre será mejor -en general- que TIRAR, cuando económicamente la reparación sea rentable. A mí, también me inculcaron la necesidad de cuidar, mantener y reparar en su caso cualquier aparato o equipo con el fin de optimizar tanto su propio funcionamiento como nuestra propia economía. Obviamente no hay que dejar de lado los aspectos tanto éticos como de sostenibilidad ecológica que vienen aparejados con el uso de una tecnología de consumo tan desproporcionado como el que tenemos en la actualidad y que por desgracia parece que va a continuar largo tiempo. Por otra parte, me gustaría hacer notar esa “sensación” que sentimos (sobre todo en nuestros comienzos como técnicos) cuando logramos solucionar una avería que nos permite alargar la vida del aparato que nos han dado a reparar. Esa “sensación” te llena de motivación y refuerza la actitud frente a nuevos retos profesionales. En resumen, REPARAR RAZONABLEMENTE SOLO TIENE VENTAJAS TANTO ÉTICAS, ECONÓMICAS Y ECOLÓGICAS COMO DE MOTIVACIÓN PROFESIONAL, YA QUE NOS HACE HUMANAMENTE MEJORES Y TECNICAMENTE MEJORES PROFESIONALES.
Eugenio Nieto dice
Grandes palabras, Roberto.
Saludos
Juan Carlos dice
Soy otro de los de la “vieja escuela” que ha reparado muchos aparatos que casi podían considerarse piezas de museo. Creo que salvo los casos de electrónica de consumo, los electrodomésticos (mi sector) se tiran con toda una vida por delante. ¿Obsolescencia? ¡¡¡¡Si lo estamos pidiendo nosotros!!!! Compramos un aparato de x características pero al menos precio posible por que “total, solo duran siete años” (hasta hace poco la vox populi decía que duraban 10) y cuando se avería resoplan mis clientes y se hacen sus números… “150 de la reparacion, con algo mas que salga, 200… Compramos nuevo” y el precio que yo les había presupuestado era menor a esos primeros 150. Pues bien: Sin pestañear prefieren gastarse 500 euros en nuevo antes que 150 en una buena reparación en un aparato con mucha vida util por delante. Pena me ha dado ver estos años atrás los aparatos llenos de vida que se han llevado a la chatarra por los “planes renove”.
Y encima el fabricante, que no es tonto, sabe que la vida estimada que le va a dar el usuario es de ¿7? años. ¿Para qué va a molestarse en diseñar unos componentes y utilizar unos materiales que duren mucho más?.
La pescadilla se muerde la cola…
Eugenio Nieto dice
Efectivamente, todos debemos hacer autocrítica.
Se puede comprar un equipo nuevo, teniendo en cuenta que el viejo puede repararse y revenderse, o donarse, o muchas otras alternativas con menos impacto.
Saludos
Xabi dice
Me parece bien el aplicar la ética en el tema de reparar aparatos antes que tirar. Soy de la vieja escuela, de cuando las cosas duraban mucho. Además trabajo reparando aparatos. Pero no nos engañemos, el problema está en el origen de los aparatos, no en el destino que les llega antes o después. Me explico; todos hemos oído hablar de la obsolescencia progamada, si los fabricantes aplicaran esa ética no tendríamos el problema de aparatos en perfecto estado de uso que “fallan” inexplicablemente y nos obliga a comprar uno nuevo ya que su reparación es demasiado costosa. Sucede incluso en las baterías de los dispositivos, más bien en sus circuitos reguladores. Pero ese problema está lejos de solucionarse, y ni de lejos está a nuestro alcance. Nos podemos lamentar, pero no lo arreglaremos. Una pena…
David González dice
Lo cierto es que da mucho coraje tirar por no reparar.
Yo también soy de la opinión de que, si no se excede mucho el precio, prefiero reparar por esa conciencia de la que hablas.
Los aparatos tienen más de una vida y que la comodidad, el consumismo y el desprecio a lo que cuesta crearlo sea una constante, me da asco.
Soy de la opinión de que la actitud es ser más sostenble.
En la época de nuestros padres muchas cosas se hacían pensando en que tenían que durar mucho tiempo, el prestigio de las marcas se basaba en ello.
Desde hace varios años eso no importa y se tira a la basura todo aquello que quizás tenga algo sencillo que reparar pero, que resulta que comprar un nuevo sustituto es más barato que la dicha reparación.
Sigamos reparando que la calidad no disminuye por eso.
Eugenio Nieto dice
Estoy muy de acuerdo, David.
Saludos
Montse dice
Yo pienso igual que tu, pero pasa que cuando tienes,por ejemplo, una lavadora, por reparar, te dicen que valdra X….. y que es mejor comprar una nueva, y esto me fastidia pues la mia esta perfecta por fuera. Pero si a pesar de todo la arreglo, lo harn bien para que me dure? o se rompera al cabo de poco…….y si compro una de nueva que hacen ellos con la mia que tiro, la arreglan y la venden ? Pienso en un estafa siempre.
jose alejandro dice
como dices tomar decision de reparar o tirar por que no me gusta tirar cosas pero uno piensa eso en tirar por que no encuentras la manera
de reparalo o al tecnico que pueda una vez fui a llevar una consola de video juegos lo arreglo en 30 minutos y le pregunte que tenia que aprender o saber para poderlo arreglarlo yo mismo y me dijo primero debes de saber lo de electronica me dijo si vivia cercas te ahi para enseñarme
para mi mala suerte me quedaba muy lejos el local busque
muchas escuelas por suerte solo habia uno cercas por eso fue que entre a un curso de 2 años electronica para no tirar se me hace genial reparar cosas que todavia puede seguir todavia tu mismo pudes hacerlo y lo interesante de la escuela cuando terminas el curso de dos años tienes que construir algo con tus compañeros en equipo
eso apenas estoy comenzando
fidestec dice
eldiario.es publica un artículo relacionado. Puedes verlo en http://www.eldiario.es/turing/nuevos-metales-preciosos_0_107439920.html
MAnuel dice
Hola Eugenio, la verdad es desolador como estos niños sufren. Aparte de reparar que en ocasiones se me va de las manos la reparación o no encuentro a nadie que lo pueda reparar, se puede optar por el reciclaje, hace unos años intente abrir un PUNTO LIMPIO DE RECICLAJE DE APARATOS ELECTRICOS Y ELECTRONICOS, que por culpa de la financiacion y de los politicos no pude llevar a cabo ese proyecto, la idea era recuperar todos los aparatos que ya nadie quiere, rotos o son viejos.
Mi pregunta es ¿se le puede recupera el coltan a las placas electrónicas?
MAnuel dice
Hola Eugenio, la verdad es desolador como estos niños sufren. Aparte de reparar que en ocasiones se me va de las manos la reparación o no encuentro a nadie que lo pueda reparar, se puede optar por el reciclaje, hace unos años intente abrir un PUNTO LIMPIO DE RECICLAJE DE APARATOS ELECTRICOS Y ELECTRONICOS, que por culpa de la financiacion y de los politicos no pude llevar a cabo ese proyecto, la idea era recuperar todos los aparatos que ya nadie quiere, rotos o son viejos.
Mi pregunta es ¿se le puede recupera el coltan a las placas electrónicas?